Durango ha sacado a licitación la Fase II de la reurbanización de la antigua traza del tren, la más importante y compleja de este plan de transformación urbana que busca coser definitivamente las dos mitades de la villa tras el soterramiento ferroviario en 2012.
El presupuesto base de licitación asciende a 1.199.961,13 euros (IVA incluido) y las empresas interesadas podrán presentar sus ofertas hasta el 6 de octubre a través del perfil del contratante en www.durango.eus. El objetivo es comenzar las obras en noviembre.
Las fases 1 y 3 del proyecto, ejecutadas en las calles Trenbide y Untzillatx, han permitido derribar antiguos elementos ferroviarios, como muros de cerramiento y la solera del apeadero, para dar paso a una nueva zona verde de más de 2.260 m², equipada con mobiliario urbano moderno y un alumbrado público renovado.
Arranca la licitación de la fase más compleja: la intervención afecta a un tramo de unos 570 metros de longitud, entre las calles Ermodo y Ollería, en pleno centro urbano. Se dividirá en dos zonas de actuación para minimizar las molestias vecinales y garantizar la continuidad de los accesos:
- Zona 1 (Ermodo – Matxinestarta Kalea): comprende unos 280 metros. Se generará un eje verde peatonaltotalmente accesible, integrando las fases anteriores y que permitirá conectar el parque de Ibaizabal con el espacio recuperado junto a Musika Eskola. Se rehabilitará el puente metálico histórico sobre el río Mañaria, construido a principios del siglo XX, que dejará de estar en desuso y pasará a ser un paso peatonal y ciclista.
- Zona 2 (Matxinestarta Kalea – Ollería): con unos 290 metros de longitud, supone la parte más compleja de la obra, ya que conecta varias calles principales del municipio, como Juan Mari Altuna y Ollería. Se proyecta la creación de zonas verdes, la conexión con los bidegorris ya existentes y la reordenación de aceras, pasos y aparcamientos.
Incluye una amplia batería de actuaciones que van desde la rehabilitación del puente metálico sobre el río Mañaria para uso peatonal y ciclista, hasta la mejora de la accesibilidad y ampliación de aceras, con pavimentos adaptados y eliminación de barreras arquitectónicas.
Contempla la creación de nuevas zonas verdes y estanciales que permitirán plantaciones de nuevo arbolado posteriormente y la conexión y ampliación de bidegorris, diferenciados de las áreas peatonales para impulsar la movilidad sostenible. Además, se reordenará el tráfico con pasos elevados en cruces estratégicos como Juan Mari Altuna y Ollería, se renovará la iluminación, el mobiliario urbano y las infraestructuras básicas, y se incorporarán medidas ambientales y de seguridad para proteger el cauce del río Mañaria, garantizar una correcta gestión de residuos y salvaguardar el hábitat del visón europeo.
Elemento singular de esta fase es la recuperación del puente del ferrocarril sobre el río Mañaria, que formó parte de la línea Bilbao-Donosti hasta 2012. Su rehabilitación permitirá integrarlo como patrimonio histórico dentro de la trama urbana, convirtiéndolo en un símbolo de la transformación de Durango. El proyecto se enmarca en el convenio de cesión firmado con Euskal Trenbide Sarea (ETS) en abril de 2024, mediante el cual Durango recibió más de 9.300 metros cuadrados de superficie liberada tras el soterramiento del ferrocarril.
Mireia Elkoroiribe, alcaldesa de Durango, ha subrayado que “la Fase II de la reurbanización de la traza del tren es decisiva para lograr la plena integración de los terrenos liberados por el soterramiento, que durante décadas dividieron nuestro municipio. Con esta licitación damos un paso fundamental para transformar un espacio degradado en un eje verde y de convivencia que unirá barrios, mejorará la movilidad y reforzará la calidad de vida en Durango”.
Elkoroiribe ha añadido que “este proyecto representa nuestro compromiso con Durango y con todos sus vecinos y vecinas. No se trata solo de una necesidad urbana, sino de una oportunidad estratégica para construir un municipio más unido, sostenible, accesible y habitable”.